Se ha convertido en un referente dentro de la vida musical de la ciudad. Cada año, El Día de la Marmota vuelve al Centro Andaluz de Arte Contemporáneo de Sevilla el primer fin de semana de febrero para acortar el invierno, diga lo que diga el roedor. Dos días de conciertos, actividades y diversión al aire libre. Si bien las previsiones anuncian algo de lluvia, éstas serán débiles e intermitentes por lo que, si todo continúa así, podremos disfrutar de uno de los primeros festivales del año en todo su esplendor.
El elenco de bandas es imponente y en la jornada de hoy hemos conocido su distribución por días. Así, el sábado 4 arrancarán Los Perversos en el Escenario Principal a eso de las 12.00 horas. Les seguirán los onubenses Delbosque y Borneo. A partir de las 15.30 se sucederán Alien Tango, Emmett y Conmutadores. Mientras tanto, en el Escenario Emergentes se darán cita, desde las 12.40 horas, Why We O, Leicomers, Escuelas Pías, Löbison y, para terminar, Terry vs. Tori.
El domingo le tocará el turno a Delamina, Byron Co., Peces Barba y Naja Naja. Uno de los platos fuertes de la jornada será la actuación de Pájaro, que se subirá al escenario a eso de las 16.40 horas. Para cerrar la tónica rockera del Escenario Principal, Toni Love & The Dirty Band cerrará el último pase sobre las 18.00 horas.
Si hablamos del Escenario Emergentes -instalado junto a la puerta de la UNIA- a lo largo del segundo día contaremos desde las 12.40 horas con Homeless, Marklenders, Favx, Quintín Vargas y Maybees, cuya actuación está prevista para las 17.20 horas. Jamonja, La Rubia Pincha y DJ Fantasma serán los encargados de amenizar las esperas entre conciertos desde la carpa a pié de césped.
La entrada es gratis y los niños son bienvenidos (hasta habrá dos castillos hinchables en los que gastar energía). A lo largo del día se servirán comidas en el ambigú de Café Cartuja y toda clase de bebidas espirituosas en las barras allí instaladas. Y si es cierto que el tiempo no acompañará por completo, las lluvias previstas son muy escasas y la organización cuenta con un plan de contingencia para alterar los horarios en el caso de que fuera necesario.
Nada más que decir salvo hacer el necesario alegato a favor del consumo de música en directo y el apoyo a la escena local, así como la innegable satisfacción de descubrir nuevas bandas, nuevos sonidos y, quién sabe, nuevos amigos. ¡Arriba excursionistas! Nos vemos en El Día de la Marmota.
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