Marat-Sade de Peter Weiss plantea la cuestión de si la revolución se consigue desde el compromiso colectivo o por el contrario depende del individuo, de su desarrollo y trasformación personal. No creo que sea posible una sin la otra. La otra cuestión central de la gran obra del autor alemán es la disyuntiva Igualdad-Libertad, “no es posible la libertad sin igualdad” o por el contrario es necesario establecer parámetros de libertad individual, de prensa, de asociación, de mercado, para conseguir la igualdad social. Estas son las cuestiones que plantea esta obra referente del siglo XX.
¿Y que mejor sitio que un psiquiátrico para discutir tales cuestiones? Los enfermos mentales serán parte de una obra de teatro dirigida por el Sr. Sade, donde el Sr. Marat cuestiona los planteamientos individualistas de su director, y el director centro psiquiátrico establece los niveles de censura.
Estos son los mimbres con los que la compañía de teatro sevillana más internacional TNT Atalaya crea una obra de teatro expresionista, donde lo visual toma una gran importancia, gracias a la increíble imaginación de su director Ricardo Iniesta que hace una auténtica demostración de posibilidades estéticas y sensitivas a partir de un piano, unos bancos y unas telas blancas, explotando las posibilidades de los objetos, los cuerpos, los espacios y las luces, toda una gozada de cuadros y más cuadros llenos de belleza, luz, color, ingenio y creatividad.
Los cuerpos, el teatro físico son muy importantes en las propuestas de TNT, desde el primer momento los cuerpos son expresiones de un modo de entender el teatro, cuerpos cuyo movimiento y acción en el escenario provocan en el espectador la ilusión. Fantástico el trabajo de los internos del psiquiátrico, con unos movimentos, unas miradas que nos llevan al mundo interior de unos personajes realmente especiales, excelente el trabajo coral. Y grande el trabajo de Carmen Gallardo como presentador del expectáculo, aunque realmente el trabajo de sus compañeros está a una gran altura, obra de primer nivel señoras y señores.
Que maravilla ver a actores que saben cantar, bailar, actuar, actores totales, la música va hilando la obra con canciones burlonas que alimentan el conflicto entre Marat y Sade.
Además de la belleza visual de la obra, otro de los puntos álgidos es cuando Marat mira al público y les habla directamente, rompe la cuarta pared y nos dice ¿Y que importancia tiene un poco de sagre derramada en nuestra revolución, cuando vosotros burgueses para conseguir y mantener vuestros estilos de vida necesitáis derramar ríos de sangre, océanos de dolor y terror en este mundo? no es literal, pero te deja k.o.
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