28 abril, 2024
El disco en sí es una sucesión fluida y orgánica de soul, funk y afrobeats pertrechadas perfectamente por unos instrumentistas que se dejan la piel en que sus notas nos alcancen de lleno.

Pongámonos un poco al día. Lo primero decir que estos tipos son de Sydney y que llevan el estilo afro-funk hasta muy altas cotas.

A partir de ahí ya todos pueden ser detalles casi sin importancia para algunos, pero con mucha miga para nosotros los devoradores de soul y funk.

En 2011 entraron a formar parte de Record Kicks, sí ese tremendo sello del que hace poco asistimos a su décimo aniversario, con un disco homónimo. Claro, todo ello después de arrasar en su tierra natal y sonar por medio mundo en radios especializadas.

Aquel disco contaba con colaboraciones de lujo como  Jojo Kuo (ex Fela Kuti / El Daktaris / Antibalas) , Roxie Ray (Dojo Cuts) , Ray Lugo ( Kokolo Afrobeat Orchestra ) y Afro Moses, mientras Amayo, percusionista y vocalista de Antibalas Afrobeat Orchestra escribía el libreto de canciones.

Su segundo álbum está a punto de salir a la calle de forma oficial, 25 de Noviembre, y es la continuación perfecta para su ópera prima.

El disco en sí es una sucesión fluida y orgánica de soul, funk y afrobeats pertrechadas perfectamente por unos instrumentistas que se dejan la piel en que sus notas nos alcancen de lleno.

Te puedes recrear en sus composiciones “Dark River”, te puedes dejar llevar por el ritmo desenfadado de quien no tiene prejuicios a la hora de crear y encima te lo restriega por la cara “Red Green Live Die” o bien arrastrarte a los sonidos sucios y decadentes del deep funk en estado puro, como ocurre en su primer single “Cairo Uprising”, con esos sonidos de trompetas evocadores y adictivos.

Podría parecer que 8 temas son pocos para un disco de estas características, pero es un número perfecto para mostrar de lo que son capaces y no llegar a saturar tus oídos, porque seamos sinceros, el funk instrumental no está muy de moda que digamos, e incluso a nosotros hay veces que nos puede resultar algo monótono. Pero este no es el caso. La mezcla de estilos muestra la versatilidad en la paleta de colores de estos músicos.

Sintetizadores, notas que arañan, o justo lo contrario, sonidos pesados, que serpentean por el fango es lo que os vais a encontrar en Power Struggle. El carácter maduro de las composiciones hace el resto para que la escucha del disco no sólo no resulte redundante sino que ofrezca al oyente toda una experiencia en el continuo aprendizaje de este estilo musical que tantas buenas horas nos ha ofrecido siempre.

En definitiva, un disco que os recomiendo NO OS PERDÁIS, porque realmente lo vais a disfrutar. Una noche tranquila en casa, una copa de vino, un buen libro o una buena revista musical y de fondo The Liberators y sinceramente daréis gracias a la vida por todo lo que os ha dado.

Por cierto, el disco está grabado en una sola toma, captando todo el espíritu del directo, y eso se nota. Así que verlos en un concierto tiene que ser tremendo. Los echamos en falta en Londres.

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