Fun Club sigue iluminando la noche sevillana en el mismísimo corazón de la ciudad. El aburguesamiento (al menos a la vista) de la Alameda de Hércules no ha hecho cambiar el espíritu del local de los locales de nuestra capital, y el escenario sigue siendo un punto de encuentro de muchos y variados sonidos. Sus muros aún reflejan los ilustres visitantes, músicos y no músicos, que han pisado el lugar, un lugar que tiene una hora de cierre más que generosa. Por si fuera poco, también es cómplice musical de celebraciones como South Pop y El Día de la Música. Nos siguen sobrando los motivos; Funclubrecords está tomando forma.
En octubre, desde Sevilla, Ruido Pegajoso se acercará a Fun Club con el enormísimo disco que es Sonrisas Pegajosas (2013) bajo el brazo. El hombre/banda, Fran Torres, nos hará disfrutar sin duda del pop impecable y con mayúsculas de sus dos álbumes, una cita ineludible para todo fan de Supertramp, The Beatles o The Beach Boys, y al fin y al cabo del pop de harmonías vocales, pero con identidad propia. Fran hila algo más fino a este respecto:
[…] Por mis manos han pasado muchos, muchos discos y he escuchado mucha música. Siempre grandes clásicos de los años 60 y 70 ingleses o americanos. He aprendido mucho escuchando, pero siempre tengo y tendré este trío de ases en lo más alto, quizá por nostalgia pero no dejo de aprender cosas nuevas de estos gigantes. (Achtung! Diciembre 2013)
Su debut Ruido Pegajoso (1999) no difiere mucho de esta última entrega, sin embargo, aunque comparten espíritu, Sonrisas Pegajosas (2013) nos trae un sonido refinado, lleno de armonías vocales, canciones directas, optimistas sin caer en vacuidades, o cayendo en ellas de forma irónica. La diferencia con el primer álbum, es que tenía temas concretos que sobresalían sobre los demás. Con Sonrisas, tendríamos un problema grande a la hora de decidirnos. En su aparente sencillez, Sonrisas Pegajosas no tiene canciones ni machaconas ni facilonas, y está tan lleno de influencias que no lo hacen esclavo de nadie. El tono es inocente a veces, pero no tonto, divertido, pero no vacío, optimista, pero no ciego. Si la calidad de un álbum o canción reside en las veces que lo pones o las buenas sensaciones que transmite, aquí no hay duda.
La inteligencia de la grabación se puso a prueba en la Sala Events, actuación que 8 Pistas reflejó, y de la que Fran y la banda salieron fortalecidos. Su sonido no deja resquicios por donde encontrar fallos, gracias a la idiosincrasia de Fran, es decir, el cuidado al detalle, y a no incluir canciones por incluirlas. De ahí que Sonrisas Pegajosas es lo que es, un producto sin mácula en espera de que vayas a su encuentro en octubre, en el mismísimo Fun Club. ¡Allí estaremos!
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