23 abril, 2024
Cerca de dos horas de concierto, disfrutando de una de las bandas que mejor lo saben hacer sobre un escenario, sintiendo cada gota de sudor que bajaba por nuestra espalda, aunque curiosamente hoy no han sido muchas.

Fotografías por Esperanza Mar

Teatro Alameda,  22/04/2016

No fue ni la primera vez ni la última, esperamos, que Freedonia visita Sevilla. Sus pies se han aposentado en varios escenarios de la capital hispalense entre los que podemos recordar Sala Malandar, Teatro Quintero o Nocturama.

Quizás en el de esta noche es en el que menos público hemos visto, si bien el teatro presentaba una muy decente asistencia de recurrentes y neófitos en este mundillo del Soul.

Inicialmente el ambiente estaba algo frío, techos altísimos, espacios demasiado amplios, sin recovecos para sentirte arropado y una sensación como de eco hacía que los ánimos estuvieran cuanto menos bajo de revoluciones. Era algo así como cuando empiezas a meter el dedo gordo del pie en la piscina de tu hermano, o en el mar a primeras horas de la mañana. Sabes que en breves segundos vas a estar disfrutando como un niño pequeño, pero la primera impresión no te la quita nadie.

Quizás por ello o simplemente porque querían mantener un horario medio decente los componentes de la banda hicieron su aparición casi a su hora para abrirnos la puerta de su paisaje interior. De sus bares noctámbulos, de sus tardes de ensayos infinitos, de sus charlas monotemáticas y plurales donde los nombres de Etta, Diana, Gladys o Martha estarían seguro presentes.

10 años fluyendo, 10 años caminando con paso firme, 10 años de carreteras infinitas, de personas peculiares, de situaciones engorrosas o divertidas, de discusiones y preciosas reconciliaciones, de compartir lo más mundano y lo más íntimo. En fin, 10 años de carrera, que se dice pronto.

Tras la consabida introducción instrumental y la presentación a garganta partida para la señorita Maika Sitte el concierto comienza con “Dignity and Freedom”, tema que abre su último trabajo, para continuar con “Living´ on” también del mismo disco. Dos cortes de medio tiempo que sirvan para calentar la voz de Maika y nuestros cuerpos. Terminamos de afinar instrumentos y escalofríos y damos un pasito más con “You can´t stop us”.

Tras este comienzo cargado de entusiasmo y energía, como cuando abres una fuente por primera vez llega el fluir continuo que quita la sed, que te ayuda a beber y a despejar la mente, llega con la forma de “I don´t need you”. Pero no nos relajemos ya que “Upside Down” aparece mucho más revolucionada que la original de Diana Ross, como el típico chorro abruptamente sorpresivo que nos pone perdido a la mínima que no estemos atentos. Momento para los primeros contoneos de Maika que continúan en “Skate”.

Pero apacigüemos un poco a la bestia, dejémonos llevar por el frescor que aplaca el calor de nuestro cuerpo, dejemos que el agua nos empape por completo y perdámosnos en los altos de  “It´s gonna be fine” o en la deliciosa música instrumental de “The Avengers”.

Tras el descanso del guerrero volvemos a la carga con “Man like me” y “Dreaming about you”.

A estas alturas del concierto y tras la sabiduría que da el haberlos visto en más de 4, 5 o 6 ocasiones uno empieza a preguntarse algunas cosas. Lo primero que te viene a la cabeza es ¿Dónde están las canciones de su primer disco?. Esta pregunta siempre ha sido recurrente tras verlos en directo, y es que tiene dos discos en el mercado y, sin embargo, tiran de versiones mucho más que de su primer trabajo. Dejo la respuesta en el aire.

Y la otra pregunta es ¿qué pasa cuando tienes uno de esos días donde la energía se te escapa del cuerpo sin poderla controlar y no te queda apenas para imprimirsela a tus interpretaciones?. Que quede claro que no me estoy quejando, ni mucho menos, pero hay que ser sincero, ni mucho menos la de esta noche está siendo la mejor interpretación de la banda. Puede que el lugar no haga que el calor se transmita de un cuerpo a otro, cosa que ayuda mucho a crear ambiente, pero no debería ser excusa ya que personalmente he asistido a conciertos en sitios más variopintos que este y la atmósfera era bien distinta. Se ve que el grupo está dando todo lo que tiene, pero a veces lo que tienes dentro de ti es apenas un reflejo de tu esencia natural. Como agua que sin razón aparente viene algo turbia río abajo.

Parece ser que me han escuchado porque “Working class” y “Running to nowhere” de su ópera prima viene a desmentir algunas de mis palabras, aunque la sorpresa dura poco porque aparece una nueva versión de “Funky Voodoo” para confirmar que los escasos vistazos a su disco homónimo serán brillos pasajeros en la superficie de esta noche.

Entrando ya en la recta final nos encontraremos con algunas de sus obras más representativas junto con algunas joyitas como “Crosstown traffic” de Jimi Hendrix o “Don’t Let Me Be Misunderstood” de Nina Simone.

Está claro que antes de cortar el grifo, antes de que le río se seque, antes de que nos vayamos de la playa en verano hay que pegarse el último chapuzón a lo grande, y para ello que mejores temas que “Shake your body”, “The time has come” y “Beggin you”.

Cerca de dos horas de concierto, disfrutando de una de las bandas que mejor lo saben hacer sobre un escenario, sintiendo cada gota de sudor que bajaba por nuestra espalda, aunque curiosamente hoy no han sido muchas.

About Author

DEJANOS TU COMENTARIO

Loading Facebook Comments ...

Deja una respuesta

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.