Beacon Theatre, Nueva York – 12 de junio
Anoche se celebró en la ciudad de Nueva York la 70 Edición de los Premios Tony, que se conceden anualmente a las mejores producciones de teatro.
Desde el principio, el glamour de la gala se vio empañada por el reciente atentado terrorista de Orlando, y no faltaron las muestras de respeto a las víctimas de este trágico suceso en numerosas ocasiones.
El polifacético James Corden fue en esta ocasión el maestro de ceremonias, y nos dejó algunos momentos realmente memorables, como el número inicial, donde sorprendió a la audiencia con un divertido mash-up de mas de una decena de musicales distintos encadenados de forma muy original. Aunque – todo hay que decirlo – Es muy difícil superar al gran Neil Patrick Harris como showman absoluto.
El fenómeno musical del año: “Hamilton” del puertorriqueño Lin-Manuel Miranda, cuenta la historia de uno de los padres de la nación americana en clave de hip-hop, y se ha convertido rápidamente en toda una revolución en Broadway. Con dieciséis nominaciones, lideraba las encuestas, y consiguió llevarse nada menos que once premios, incluidos los de Mejor Musical, Libreto, Dirección, Orquestación, Coreografía y Actor, que fue a parar a manos del aplaudido Leslie Odom Jr. Se quedaron a las puertas de superar el record de “The Producers”, que con doce galardones sigue siendo el más premiado de la historia de los Tony.
Pero como Corden ya avisó: “No todo girará alrededor de Hamilton. También habrá pausas publicitarias”. Y afortunadamente, hubo lugar durante la noche para que otras destacadas producciones obtuvieran su reconocimiento.
“The Color Purple” se erigió como el Mejor Revival, y Cynthia Erivo se llevó a casa su más que merecido Tony a Mejor Actriz por su sobresaliente trabajo en esta obra.
Dos leyendas vivas: Frank Langella y Jessica Lange recibieron también sendos premios por su labor en “The Father” y “Long Day’s Journey into Night”, respectivamente. Muy emotivo el Tony a Mejor Actriz de Reparto para la veterana Jayne Houdyshell – el primero que ha recibido en toda su carrera – por su papel de madre cotilla en la tierna “The Humans”.
No podían faltar los números musicales, escenificados y con el vestuario original de cada obra. Las canciones de “School of Rock” (la nueva producción del gran Andrew Lloyd Webber), “On Your Feet!” (con la aparición estelar de Gloria Estefan), o “The Color Purple” (con presentación de Oprah Winfrey), pusieron la nota de color a una velada que se antojaba algo monocromática.
Una ceremonia con sabor agridulce, y que sirvió de excusa para celebrar la diversidad, la libertad, y el amor por encima de todo. Como la mismísima Barbra Streisand llegó a decir durante la gala: “El arte nos entretiene, nos educa y, en momentos como estos, nos consuela”.
https://youtu.be/PRVwHP__qMM
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