Dice Joaquín Sabina que un cantante debe tener eso que nadie sabe lo que es pero que es lo único que importa. La misma idea que Bunbury declama en el estribillo de La Actitud Correcta en su último disco. Ese algo etéreo e imposible de definir que no se aprende de los libros ni en academia alguna. Un algo inalienable que no sabemos concretamente nominar pero que sí somos capaces de identificar. Un algo que uno encuentra en Patricia Lázaro desde la primera vez que la escucha. No sé si será la arrolladora personalidad de su voz de garganta con arena, que suena a antaño, a clásico. O todo el ideario y la poesía de su discurso lleno de identidad e intensidad, existencialista, costumbrista y visceral, almodovariano, con un lenguaje muy personal y certero hasta la raíz.
Patricia Lázaro lanzó en el pasado 28 de enero el crowdfunding de su próximo disco, Gloria Pelea (https://es.ulule.com/gloriapelea/). Las doce nuevas canciones de Patricia están en marcha, cabalgan desde los borrones en libretas que un día fueron para colarse en nuestras casas y en nuestros viajes, para comenzar a sonar.
“En los nuevos doce temas de Gloria Pelea, Patricia ordena la potencia más intolerable, el anhelo, la justicia y la emoción. Redacta en verso salvaje lo que todas intuíamos y atraviesa por el camino más improbable (lleno de rokas) los apuntes y las lecturas que la han salvado.
Aquí no encontraréis la compostura del estilo, ni la dulzura del coro en el templo, pero sí podréis presenciar una mente al galope que ha sabido cultivarse desde la emoción, y no al revés, como estamos hartos de ver.”
Como mostró en su primer y único disco hasta la fecha, Todo irá bien, mamá; la artista granadina es puro rock. En algunas canciones se puede ver la carretera fronteriza y se puede oír cada paso de unas botas polvorientas bien raídas que guardan la experiencia que da el camino. Sus canciones navegan entre dos puertos: la americana, el Dylan que transitaba del folk al rock, la poesía de Patti Smith; y al rock argentino más genuino, a deidades profanas como Spinetta o Charly García.
El disco promete seguir transitando esa senda, sacudirse la chaqueta e investigar nuevos caminos. Patricia ha lanzado proyecto al mundo, lo ha puesto en sus manos. Sus seguidores podrán participar en el disco mediante la financiación parcial a través de los mecenas. Éstos, además de aparecer como productores ejecutivos en los créditos del disco, recibirán sus respectivas recompensas en función de la cantidad con la que colaboren (desde el CD firmado junto a accesorios como camisetas y bolsas, hasta paquetes que incluyen parte de su libreta, manuscritos, escuchas en directo en el estudio o incluso conciertos privados).
Iba a llamarse “Gloria” como la canción que abre el disco:
Hay olor a gloria en el ambiente, a tiempos buenos, a historias increíbles…
Esa canción contiene un secreto himno, una siniestra oración donde se desenmascara a los farsantes, se homenajea a los puros y se reflexiona sobre la iconografía de la gloria prometida.
Iba a llamarse Gloria, como ese grito en deletreo de Patti Smith sentada en las escaleras del Hotel Chelsea , como la punkicita intelectual encerrada sin discos en el psiquiátrico de Bye bye Blondie. Dentro de Gloria ya teníamos muchos nombres, muchas amigas. Todas, igual que yo, soñando somnolientas con participar de todo lo extraordinario y potente que la vida tiene para dar, y que nos rodea tan de cerca, que casi nos incluye.
Entonces le creció un apellido, un concepto que lo completa, lo apuntala y también lo parodia: «Pelea».
Pelea se esconde y se revuelve detrás de Gloria (despeinada) no suele salir en la foto. Contiene todo el esfuerzo velado, toda la búsqueda incansable; el entrenamiento y el ensayo, el despertador y la factura, el ruido que no te deja trabajar, el silencio denso en el que parece que no trabajas, que ya no existes. En definitiva, todo el trabajo.
Hay un segundo de gloria, un flechazo a primera vista, un olor y temperatura perfecta que apenas dura, pero que afecta y conmueve de la manera más profunda. Como una esperanza o una peste. El público aplaude y vuelta al barro.
Gloria Pelea es una colección de canciones, de narraciones, cuya trayectoria y relación es profunda y antigua, aunque sus canciones sean recientes y se sigan componiendo en el estudio.
El objetivo está marcado en alcanzar una cifra meta de financiación de 9.627 euros antes del 9 de marzo. A falta de cuatro días, el objetivo está alcanzado al 90 %, hay que seguir peleando para alcanzar la gloria en este arreón final. Hay que colaborar, la ocasión lo merece. Está cerca.
Gloria Pelea ha sido grabado en Studio B con Luka Kranky, habitual cómplice de Patricia, como productor y guitarrista, Álex Riquelme a la batería y Ricardo Esteban al bajo, además de Bernardo Calvo y Pedro Cazorla a los mandos y arreglos. Todo lo relacionado con el arte y la imaginería de Gloria Pelea, incluído el diseño de las recompensas, ha corrido por cuenta de la artista Anabel Perujo, también detrás del arte de trabajos de otros artistas como Carmen Boza o el Kanka.
Patricia se instaló en Madrid en 2013. Al principio participó en certámenes de canción de autor, en los que sus canciones salieron muy bien paradas, desde ahí ha recorrido cantando los mejores bares y salas de nuestra geografía.
En 2015, Patricia publicó su primer disco “Todo irá bien mamá” editado por Warner Chappel, gracias a Juan Ibáñez, su mentor y amigo. Este trabajo es a la vez una ópera prima y un grandes éxitos de las canciones con las que contaba en aquel momento. Un trabajo sincero, que se reveló muy sólido, y que me ha acompañado hasta la fecha, al que le debo mucho.
En febrero de 2019 comienza con los ensayos de cara al disco que empezaría a grabarse a finales de Marzo pero que se vería interrumpido por una llamada maravillosa. En abril es presentada como la nueva incorporación de la Leiband, banda del artista y compositor Leiva, como corista de la gira «Tour Nuclear». Una experiencia extraordinaria, un hecho maravilloso y único que conlleva una responsabilidad totalmente incompatible en cuerpo y alma con el desarrollo de la grabación de un disco personal, una oportunidad también, para que el recorrido del mismo sea, aunque pospuesto, más fructífero artísticamente.
En septiembre de 2019 retoman la grabación de Gloria Pelea y será a partir de abril, cuando vuelva a salir al ring con la presentación en Madrid de este trabajo y una serie de conciertos que irá conciliando con la gira Tour Nuclear.
Gloria Pelea de Patricia Lázaro está a punto de llegar.
Enlace al crowdfunding de Gloria Pelea
https://es.ulule.com/gloriapelea/
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