19/12/2014
Con los primeros temas de la noche, algo resultaba familiar en la Sala Malandar para aquellos a los que nuestros padres nos hicieron crecer bajo los sonidos de Triana, Medina Azahara o Alameda. Con ganas de quedarse llegaron Fausto Taranto; poco fue el tiempo que el público necesitó para dejarse llevar por el sonido del flamenco más roquero.
Comenzaron con un personal homenaje a la mítica Triana y al maestro Morente; era difícil que abriendo boca así la gente no se animara.
A lo largo de la hora y media que duró el concierto se hizo evidente el rodaje de todos y cada uno de los músicos que componen la banda; las guitarras de Paco Luque y Quini Valdivia (procedentes de la mítica Hora Zulú), la batería de Nano Díaz y el bajo de Miguel Martínez fueron el telón de fondo perfecto para la voz modulada de Ismael de la Torre. Juntos hicieron vibrar a una Sala Malandar expectante ante la presentación del grupo granadino.
Para dar una vuelta de tuerca más a un concierto ya de por sí poco habitual, tuvimos flamenco a palo seco a cargo del trío femenino formado por las tres andaluzas, Eva Díaz, Ana Sola y La Samarona, acompañadas a la guitarra por un Rubén Campos que hizo las delicias de los acordes flamencos. 
El cuarteto hizo gala del arte andaluz en sus solos haciéndonos disfrutar de los contrastes. Y es que es precisamente eso, los contrastes, lo que hace verdaderamente original a este grupo.
Y llegó la hora y nos hicieron participe -ahora sí- de su trabajo. Con una puesta en escena enérgica y natural de sus cuatro primeros temas; ´Loco por saber´, ´Como tu cara´, ´Por amarrarme´ y ´A capa y espada´ no dejaron intuir la esencia de lo que será su primer disco.
La mezcla de técnica y calidad del rock, el heavy y el flamenco cuajó bien, tan bien que nos pusieron la miel en los labios y nos dejaron con ganas de mucho más. Tendremos que esperar hasta marzo para escuchar el primer trabajo completo de este grupo que no ha dejado indiferente a nadie.
Se recomienda no perder la pista a esta banda que sin duda va a aportar aires frescos a una escena musical para la que no van a pasar desapercibidos. El heavy más aflamencado parece que ha llegado para quedarse.
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